Fotos y texto, LEONARDO CASTRO
A pocas horas de la apertura de las elecciones en Colombia, donde se elegirán mandatarios locales, regionales e integrantes de los Concejos en los municipios, las opciones afloran por todas partes, muchos aspirantes con excesivo parlamento, proyectos imposibles de ejecutar, y otros con una sequía en ideas que amerita un castigo público en las urnas.
Buena opción
Entre tantos, llama la atención un nombre, Luis Alfredo Jaramillo Moreno, de 55 años de edad, exalcalde de Policarpa, norte de Nariño, y quien vive hace 20 años en Pasto.
Con 20 años, hasta el momento es el concejal más joven elegido en su municipio natal, “llevo trabajado desde hace mucho tiempo, sirviendo a la comunidad, fui elegido concejal por un movimiento llamado Nueva Colombia en el año 1992, son más de 30 años de carrera”, dijo el candidato, quien agregó, “a uno tiene que gustarle el servicio social y comunitario, de esa manera puede poder postularse para la elección de un cargo público; ahora, según el perfil y vocación, puede aspirar a un cargo de libre nombramiento y remoción o participar en alguna convocatoria, pero con la convicción de ayudar a la gente, y cuidar la platica”. expresó, Jaramillo Moreno, quien llama la atención al utilizar ese estribillo de los abuelos “la platica”.
Varios frentes de trabajo
Abogado de profesión, hizo una maestría en Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario, y otras especializaciones, por su buen desempeño como Personero de Policarpa, buena calificación como alcalde, y pulcritud como director de entidades descentralizadas como Asopatía entre otras, le valió para ser nombrado en Planeación en la Alcaldía de Pasto hace 4 años; Diputado de la Asamblea Departamental; Defensor del Pueblo Regional de Tumaco; Contratista de la Agencia Nacional de Tierras en Nariño y Putumayo.
“Me gusta el servicio social y comunitario, hemos trasegado en varios frentes, y no he recibido una sola queja, ni he salido investigado, eso les digo siempre a mis tres hijos, y puedo verlos a los ojos con la cabeza en alto, su papá no es un ladrón, “la Administración pública es un camino muy difícil y tortuoso, aparte de las alegrías y satisfacciones, deja muchos desagravios enemigos y frustraciones, todo depende del presupuesto, si hay dinero se puede laborar, pero, sin dinero es imposible”, señaló.
Herencia familiar
Luis Alfonso Jaramillo Díaz, papá del candidato, y quien falleció hace tres años, le enseñó a Luis Alfredo, en Policarpa, a él y sus 8 hermanos, aparte de la agricultura, a ganarse la vida de manera honrada respetando a los campesinos, y sirviendo a la comunidad a través de la política, “llevar la inversión social a las comunidades es lo mejor, laborar en favor de los agricultores deja muchas satisfacciones, por ejemplo, ver a los niños y jóvenes sonreír cuando se hace la apertura de una vía, un distrito de riego, tecnificación, es muy satisfactorio, pero siempre queda faltando”, dijo el candidato.
Los mayores logros
Construir una planta de tratamiento de agua potable para Policarpa, fue una de las obras que más satisfacciones le dejó a Luis Alfredo, algo impensable hace 20 años debido al bajo presupuesto y dificultades, sin embargo, fueron fundamentales las Juntas de Acción Comunal en este proyecto, “rindió la platica, se contaba en kilómetros para tender la tubería, eso costaba muchísimo, pero, nos ahorramos la mano de obra”, dijo Jaramillo.
Millonarios recursos, pero mucha frustración
De igual manera, con el Movimiento Social de la Cuenca del Patía, en el año 1996 lograron conseguir 71 mil millones de pesos para 6 municipios de Nariño, “los cambios se miraron, en vías, electrificación urbana y rural, puestos de salud. Lo que me duele hasta el momento es la cantidad de víctimas que dejó en su momento la violencia, mi periodo fue el más difícil, conté en un ataque de la guerrilla 64 casas destruidas, la Alcaldía muy dañada, algunos muertos. Luego el paramilitarismo que acabó con familias enteras, eso duele mucho”, señaló Jaramillo.
Critica a la burocracia
Señala que estaba el proyecto de tecnificación de varias zonas del norte, “queríamos tener tecnología, agua, adecuación de tierras de manera técnica, vías, producir y laborar el campo, así asegurábamos las cosechas y la comercialización , era mí mayor anhelo, todo estaba planeado, al final no se pudo, son más los intereses de la burocracia que la inversión social”, señaló: recuerda con nostalgia como les quitaron el proyecto de la electrificadora en el río Patía, “faltó argumentación, justificación, somos una región muy favorecida, pero apartada del centro, dónde todo llega tarde, como el progreso, el dinero se mira en pago de cuotas políticas, eso no ocurre por ejemplo en Antioquia o el Eje cafetero, allá en muchos casos es la región la que importa, y no el político de turno”, comentó.
Tres propuestas concretas para Pasto
Este líder nato, ahora aspira a llegar al Concejo de Pasto, su experiencia, hace que sea uno de esos ediles que debería ocupar un puesto en el recinto; es propositivo, deliberante, se ha focalizado en tres sus propuestas: Impulso al emprendimiento con el fin de generar empleo y así combatir la desocupación de los jóvenes; seguridad, tanto en la ciudad como en la zonas rurales, y fortalecer las Juntas de Acción Comunal como parte fundamental del trabajo comunitario para que las gente se apropien de su sector. “Poner a funcionar la Oficina de Desarrollo Comunitario, la gente debe organizarse y producir, debemos ilustrarlos para la buena ejecución de los recursos públicos”, expresó.
Experiencia al servicio de la Capital
Puedo aportar al desarrollo de la capital de Nariño, tengo fundamentadas mis propuestas, la experiencia me hace decir las cosas con propiedad, Pasto como la principal ciudad del suroccidente, requiere personas propositivas y que debatan.
Emprendimiento para la generación de empleo, seguridad y fortalecer las Juntas de Acción Comunal. “Trabajar de manera articulada con la Alcaldía, empresa privada, Gobierno nacional, y los emprendedores, se puede lograr consolidar proyectos y empresa, así baja el desempleo y la inseguridad, todo va de la mano”, comentó.
Para Alfredo Jaramillo, modificar o reestructurar el POT, es vital para legalizar algunos sectores y poder invertir; también vías terciarias, saneamiento básico, manejo de residuos contaminantes, ayuda a los acueductos rurales y apoyo al deporte recreativo para jóvenes y adultos.
Inversión pensada y planificación
“Se necesita la voluntad del Gobierno Nacional, en el caso de Pasto, es el reflejo de lo que pasa en Colombia, tenemos 52 mil víctimas de la violencia, la capital se ha convertido en el refugio para los migrantes venezolanos, que entre otras cosas debemos y queremos ayudar, sin embargo, acciones de violencia como atracos, malos tratos a los vecinos, a los animales de compañía, hace que poco a poco esa buena voluntad se evapore, somos persona solidarias, pero, ellos deben demostrar con hechos que quieren ser parte de una ciudad moderna, culta, aportando buena convivencia, de lo contrario la ciudadanía asumirá la justicia por mano propia, que no es lo adecuado”, expresó.
Señaló que, “en los corregimientos los agricultores son muy dedicados, pero siguen sembrando a pérdida, la inversión del Estado es mínima, por eso, las entidades deben estar presentes, con inversión para que haya buena productividad y así las nuevas generaciones amen el campo”, finalizó.
¿Por qué se decidió apoyar a Nicolás Toro?
Es de anotar que el candidato al Concejo de Pasto, Luis Alfredo Jaramillo, que tiene el número 3 en la lista del Partido Liberal, apoya la candidatura del aspirante a la Alcaldía, Nicolás Toro, “es difícil encontrar a otra persona que conozca tanto a Pasto como el Doctor Nicolás, no podrá decir que desconoce las necesidades de alguna zona alejada del casco urbano, por esta razón, tiene el compromiso de llegar con ayuda a cualquier rincón de la ciudad”, finalizó.