
Integrantes de la Banda ‘Los Redmi’, Kevin Esteban Quenguán Vergara, Darwin Arley Álvarez Pantoja, Frank Alexander Zambrano Basante, Víctor Alonso Rosero Pazmiño, Alidt David Morales Torres y Juan Camilo Hernández García.
Los presuntos ladrones fueron identificados como, Kevin Esteban Quenguán Vergara, Darwin Arley Álvarez Pantoja, Frank Alexander Zambrano Basante, Víctor Alonso Rosero Pazmiño, Alidt David Morales Torres y Juan Camilo Hernández García, a quienes un Juez de Control de Garantías, luego de tomar en cuenta la solicitud de un fiscal adscrito a la Estructura de Apoyo de esa Seccional, EDA, los envió a la Cárcel Judicial de Pasto.
La investigación
Según determinaron las autoridades, estos sujetos antes de cometer los hurtos, analizaban la cantidad de elementos de valor poseían, dinero, identificaban y marcaban a sus víctimas, luego los interceptaban, y mediante el uso de fuerza las despojaban de sus pertenencias y objetos de valor.
En este sentido, luego de siete meses de investigativas coordinadas por la Fiscalía General de la Nación, con apoyo de la Sijin de la Policía Nacional, fueron capturados y judicializados a los presuntos integrantes del grupo delincuencial, conocido como ‘Los Redmi’, quienes fueron acusados por los delitos de concierto para delinquir, receptación, hurto calificado y agravado.
¿Dónde atracaban?
Según se desprendió de la investigación, ‘Los Redmi’, ejercían su accionar delictivo en inmediaciones al Terminal Terrestre de Pasajeros, el mercado El Potrerillo, en estos lugares aprovechaban las horas de la madrugada y la noche para asaltar a las personas que llegaban de viaje o comerciantes que tenían sus negocios en el Mercado. De igual manera, el barrio Santa Clara y corregimiento de Jamondino, al occidente de Pasta eran las zonas preferidas debido a la vulnerabilidad de las personas por cierta cantidad de dinero que maneja.
Marcaban a sus víctimas
La Policía Judicial pudo establecer que los presuntos integrantes de ‘Los Redmi’ marcaban a sus víctimas y luego, mediante el uso de la fuerza, con armas cortopunzantes o armas de fuego, los despojaban de sus pertenencias y objetos de valor.
De igual manera, establecieron que los teléfonos celulares que eran robados, los entregaban a una persona quien era la encargada de liberarlos y venderlos en otros municipios del Departamento de Nariño e incluso móviles de alta gama eran comercializados en el Ecuador.